Aclaraciones :

Por decisión propia del autor del blog, uséase yo, procuraré no poner enlaces ni fotografías. Si alguna vez lo hiciera, será foto con derecho de autor, que seré yo... Que luego viene el coco y nos cruje. Previsión, mi pequeño saltamontes, previsión.

lunes, 25 de enero de 2016

LA CABRERA. #OMG


   Partamos del innegable hecho de que soy de esas personas que se considera leonés de la cabeza a los pies. Hijo de leoneses, nieto de leoneses, bisnieto de leoneses, hasta donde sé. Amo esta tierrina mia, tuya y nuestra, seas español del Reino ( de León ) o del resto del país. He tenido la fortuna de nacer en la capital, con historia peculiar por medio, que otro día contaré o no. 

   He vivido tres cuartas partes de mi vida en León y el resto, mayormente, no fue por decisión propia. Podría estar en este mismo momento en el que escribo, trabajando en otro país y labrándome un futuro, seguramente mejor, o quizás no. He elegido quedarme en León. Por múltiples razones, compresibles la mitad de ellas, decididamente estúpidas las demás. Pero he elegido.

   Y, gran parte del hecho de estar escribiendo este post, es una de las poderosas razones para estar escribiendo esto. El redescubrimiento por mi parte, de la grandiosidad y de la belleza de una comarca leonesa que sencillamente, quita la respiración. un#OMG indiscutible, la primera vez que vayáis. Garantizado.

   La Cabrera en si, es zona de media-alta montaña, situada en el noroeste de la Provincia de León, al suroeste de Ponferrada y al Oeste de Astorga/La Bañeza. Es territorio amplio y, de hecho, se divide en la Cabrera Alta y la Cabrera Baja. Como buena zona de montaña, cuenta con pueblos pintorescos, de casas construidas en piedra y tejados de pizarras oscura, con estrechas calles excavadas en la roca, ganadas a pulso a la montaña. Montones de leña a cobijo de la nieve y el agua, comunes en un invierno normal, si tal cosa existe aún. Pueblos que viven de la ganadería desde tiempos inmemoriales, del pastoreo de una variedad de cabra capaz de aguantar la dureza del monte cabreirés. Gentes hospitalarias como pocas ( doy fe ), con idioma propio incluido derivado del llionés, el cabreirés.

   Os diría que cualquier pueblo de la zona es recomendable, porque a poco que sientas curiosidad por temas como el senderismo, la micología, el runnig, la espeleología, la arqueología, la geología, la historia, el turismo gastronómico. No tenemos tanto tiempo para enumerar cosas a ver y sentir. Pero te propongo un plan.

   Estados Unidos tiene su Ruta 66 y en León tenemos la ruta del oro romano. Por si os suena, el paraje de Las Médulas, Patrimonio de la Humanidad, se encuentra en La Cabrera. Ni mucho menos es lo único que ver. Sheldon Cooper diría algo así como - Dato verídico : la red de canalización hidrológica de Las Médulas, abarca más de 150 kms, la segunda más larga del mundo antiguo ( que se sepa ), solo superado por la red de abastecimiento de la antigua Estambul. Casi nada.

   Por investigaciones recientes, que aún siguen en curso, se han hallado numerosos canales excavados a lo largo de las montañas, por toda La Cabrera. Hay restos visibles y transitables a pie, por pueblos como Odollo, Llamas de Cabrera, Pombriego o Santalavilla. En otras localidades, se encuentran de manera más dificultosa o están demasiado inacesibles/mal conservados. No obstante, historia y restos romanos se encuentran en otras localidades como Pozos, que debe su nombre a los restos de varios pozos mineros romanos, hoy día pendientes de recuperación y puesta en valor. Más cosas que ver, en Truchas, Truchillas, La Baña, Corporales, Encinedo, Morla... te invito a escaparte a La Cabrera y perderte ( con GPS, comida  y móvil ) un día, un fin de semana, tu mismo/a.

   De lo que puedes estar seguro y segura, es de que no te dejará indiferente. Palabra de Pol.

   Seguiré informando. Un saludín.


EL TIO POL     @IrrealidadByPol en tu TL, si te apetece.


P.D. Por si no ha quedado claro, La Cabrera es cojonuda. Y si no, desmiéntemelo.

1 comentario:

Mariajose dijo...

Tal y como lo has descrito, no hay que perderse de visitarlo. Me has transportado a León. Felicidades.